EL UNIVERSAL. El actor Eduardo Xol ha recibido varios mensajes de amor y pésame tras darse a conocer su muerte, tenía 58 años de edad y días antes de fallecer fue encontrado herido en un departamento en Palm Springs, California, Estados Unidos.
La madre del actor estadounidense confirmó que su hijo murió el 19 de septiembre en el Centro Médico Regional del Desierto, el día 10 fue encontrado muy herido; de acuerdo al Departamento de Policía de Palm Springs, Xol tenía heridas importantes cuando lo descubrieron.
De acuerdo a TMZ, el actor habría sido apuñalado y cuando fue trasladado al hospital se encontraba grave pero estable; Richard Joseph Gonzales, un hombre de 34 años de Cathedral City, California, fue arrestado como sospechoso.
En sus inicios actuó en telenovelas mexicanas como "Acapulco, cuerpo y alma", "Sentimientos ajenos" y "La jaula de oro"; fue parte del show de telerrealidad Extreme "Makeover: Home Edition", y fue colaborador de la revista "People".
Nació en el 19 de febrero de 1966 en Los Ángeles, California, encarnó a Arturo Durand en la telenovela de José Alberto Castro de 1995 "Acapulco, cuerpo y alma", protagonizada por Patricia Manterola y Saúl Lisazo.
El editor Richard Pérez-Feria, amigo de Eduardo Xol, le dedicó un emotivo mensaje destacando la gran calidad de ser humano que era.
"Es casi incomprensible que esté escribiendo este post como un adiós a alguien que ha estado tan presente, tan importante en mi vida. Cuando me enteré de que Eduardo Xol había muerto, me quedé insensible. Fue imposible procesar esa información ya que no encajaba con mis miles de experiencias con él. Por favor, no me preguntes cómo o por qué en este momento... Lo que más importa es quién era: Un talentoso, hermoso, apasionado amigo, hermano, hijo y compañero. Los millones de risas, esperanzas y secretos que compartimos permanecen en la cabeza de mis pensamientos. Quiero honrar a mi querido amigo y celebrar su vida como uno que importaba a tantos. Ciertamente me importaba. Enviando amor curativo en este momento horrible a su círculo de amigos y familiares que lo amaban tanto. Tristemente, el mañana no está prometido. Quiéranse. Descansa en paz, Eduardo", se lee en el mensaje acompañado de varias fotografías.