Tamaulipas / Miguel Aleman

Hallaron en Miguel Alemán trincheras y fosas que usan los narcos para emboscadas

El sábado, mientras realizaban recorridos de reconocimiento en Miguel Alemán, Tamaulipas, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) pertenecientes al 25 Regimiento de Caballería Motorizada de Ciudad Mier, localizaron un vehículo incinerado que aún se encontraba humeando.

Al realizar una revisión del lugar, los soldados a bordo de las unidades 0925319, 0925307 y 0925591 localizaron el cuerpo -también incinerado- de un hombre que yacía a un costado de la furgoneta, la cual contaba con blindaje artesanal y usaba colores similares a los vehículos del Ejército.

En el primer momento se reportó como el hallazgo de un solo cuerpo calcinado a un costado de una camioneta Dodge Ram 1500 Laramie con blindaje artesanal incendiada en su totalidad; pero momentos más tarde se confirmaría por personal de Servicios Periciales que se trataba de cuatro cuerpos calcinados en total.

Durante la revisión que hicieron a la camioneta encontraron un agujero grande en la parte inferior que probablemente había sido originado por un explosivo enterrado en el camino. En el interior fueron encontrados un ponchallantas, varios casquillos calibre 50 y dos cargadores.

Los elementos castrenses también localizaron trincheras y fosas entre la maleza de las inmediaciones.

La Sedena determinó que aquello era una zona utilizada por miembros del crimen organizado para realizar emboscadas y ataques bélicos contra sus rivales o autoridades.

De acuerdo con el reporte, los hechos ocurrieron en la brecha que conduce al rancho El Barretal y que se prolonga hacia la presa Marte R. Gómez.

Una vez que acudió personal de la Unidad General de Investigación de la Fiscalía General de Justicia del Estado realizaron la inspección, confirmaron que la persona calcinada era del sexo masculino y que dentro de la camioneta había artefactos de acero conocidos como “ponchallantas”, casquillos calibre 50, casquillos para fusil de asalto AK47 y cargadores calcinados de ese tipo de arma.

Cerca de la zona, observaron una casa abandonada que presentaba múltiples impactos de arma de fuego y más pozos o trincheras entre la maleza.

Con el descubrimiento del sábado, sumarían ya 23 cuerpos calcinados encontrados en Tamaulipas en las últimas dos semanas.

El 22 de enero una llamada anónima alertó a las autoridades, pues reportaron la presencia de dos camionetas abandonadas e incendiadas en el kilómetro 25 + 700 del poblado de Santa Anita, en el municipio de Camargo. A su arribo, los cuerpos policiacos confirmaron la presencia de 19 cuerpos calcinados, la mayoría de migrantes.

Derivado de las averiguaciones, el fiscal general del estado, Irving Barrios Mojica, informó el 2 de febrero sobre la posible participación de 12 policías estatales en el multihomicidio. Por ello, un Juez giró una orden de aprehensión en su contra por la posible comisión de los delitos de abuso de autoridad en el desempeño de funciones administrativas, homicidio calificado y falsedad de informes presentados ante una autoridad.

Tamaulipas se encuentra asediada por las disputas territoriales de remanentes de Los Zetas y el Cártel del Golfo. Al tiempo que las facciones de los dos grupos también se enfrentan entre ellos. De ese modo, el Cártel del Noreste y su brazo armado, la Tropa del Infierno, pelea contra Los Zetas Vieja Escuela y Los Talibanes, así como atacan a Los Escorpiones o Los Metros.

A principios de noviembre pasado hubo un enfrentamiento entre estos grupos. En aquella ocasión sólo quedaron las huellas de la violencia y no se localizaron cadáveres, pero sí se observaron abandonados vehículos blindados y un camión de cebollas incendiado en la carretera de Comales a Camargo.

Si bien, Los Zetas padecieron un proceso de fragmentación desde 2012, tras independizarse del Cártel del Golfo de 2007 a 2010, el grupo criminal de la última letra ha destacado en al menos 13 entidades de México con remanentes que ascienden de tres a cinco, desde 2019 a 2021; además de su presencia en Colombia y Estados Unidos.

Ambas organizaciones se han visto disminuidas y dependen de ilícitos a nivel local como la extorsión, el narcomenudeo o secuestros. Con balaceras y ejecuciones, los grupos criminales están arraigados en la entidad y son el terror cotidiano de la población.

Fuente: Infobae

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