MILENIO. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) intensificó esta semana sus operativos contra el robo de energía en la frontera de Tamaulipas, particularmente en municipios como Reynosa, Río Bravo, Matamoros y Nuevo Laredo.
En estos puntos del estado se han desconectado numerosas conexiones ilegales, conocidas como “diablitos”, principalmente en zonas comerciales. De acuerdo con la paraestatal, durante el año 2024, estos municipios concentraron el mayor número de usuarios irregulares en todo el estado.
Como parte de una estrategia nacional para combatir el uso indebido de electricidad, la CFE continuarán durante el resto del año con estas acciones, con el respaldo de operativos conjuntos con la Guardia Nacional y del Ejercito Mexicano, con el objetivo de recuperar parte de los recursos perdidos y mejorar la calidad del servicio.
Estas medidas han generado malestar entre el sector privado, al reportarse afectaciones a negocios que han tenido que cerrar temporalmente tras quedar sin suministro eléctrico.
La Cámara Nacional de Comercio (Canaco) de Reynosa expresó su inconformidad, señalando que las inspecciones se realizan sin previo aviso ni diálogo institucional.
Argumentando que no están en contra de las revisiones técnicas ni del combate a la irregularidad eléctrica, pero exigen que se hagan con transparencia y respeto a los derechos de los empresarios, declaró Gildardo López Hinojosa, presidente del organismo.
Hasta el momento, la CFE no ha emitido una respuesta oficial ante los señalamientos, aunque ha mantenido el ritmo de los operativos, especialmente en zonas de alto consumo comercial en Tamaulipas.