MILENIO. La tormenta extraordinaria que inundó Reynosa obliga a revisar la infraestructura hídrica de los municipios para garantizar la capacidad de aprovechar el agua que la naturaleza es capaz de generar en abundancia en unas cuantas horas, señaló el director de Políticas para el Cambio Climático del Gobierno de Tamaulipas, Armando Calderón Zúñiga.
“Debemos tener nuestra infraestructura o invertir recursos para ello, porque podemos seguir viviendo eventos como este y tenemos que enfrentarlos con las obras adecuadas para el óptimo aprovechamiento de agua”, dijo.
Expuso que un primer paso es revisar y evaluar la infraestructura disponible y emitir un diagnóstico, pues ya no se puede entender la planeación urbana pensando que son zonas o ciudades con poca precipitación pluvial.
“Toda esa agua debe captarse y usarse en las temporadas prolongadas de sequía, debemos aprender de esto y prepararnos con obras hidráulicas que permitan aprovechar estas tormentas y el agua abundante no afecte a la población sino al contrario”.
Calderón Zúñiga expresó que es incierto saber si la tormenta del pasado jueves en Reynosa es un evento que se seguirá presentando o solo se trata de un caso cada cientos de años, sin embargo, hay que estar preparados.
“Es una alerta para todos, tenemos que estar preparados e ir pensando qué tipo de infraestructura se requiere construir para el mejor aprovechamiento del recurso hídrico en beneficio de todos”, reiteró.
El fenómeno también llama, agregó, a que los municipios mantengan limpios sus drenes pluviales, retirando cualquier maleza o basura para que el agua pueda fluir y seguir su curso sin problema alguno.
“Sobre todo en lugares con problemas de sequía, hay que ponerse a trabajar para canalizar esa agua hacia un vaso de captación donde se le pueda dar el mejor aprovechamiento; esto ayudará a no inundarse, que corra el agua y salga de la mancha urbana”.
El funcionario estatal insistió en la necesidad de asumir que estos eventos pueden pasar y no deben tomar las ciudades desprevenidas, porque las consecuencias podrían ser fatales.
“Que vean que estos eventos naturales pueden suceder, y por lo pronto, tenemos que contar con nuestros sistemas de drenaje y cuerpos de agua limpios para que pueda correr la corriente”.
Armando Calderón mencionó que en días pasados se realizó limpieza en el río San Marcos de Victoria, pues había mucha basura en el afluente, pero los organismos operadores de agua se tienen que encargar de sus drenes para evitar afectaciones ante avenidas extraordinarias.
Luego de haber sido una tormenta atípica la de Reynosa destacó que no hay que esperar la época de lluvias para realizar tareas preventivas y de planeación.
“Es infraestructura que debe estar en constante mantenimiento o rehabilitación porque obviamente estos eventos no avisan, nada más llegan de repente y nos pueden agarrar desprevenidos. Incluso vemos al país vecino, donde a pesar de su infraestructura, se les inundó McAllen y tuvieron muchos daños”.
El responsable del área sobre cambio climático en la administración estatal, enfatizó que todos los municipios tienen bien identificados sus puntos críticos ante inundaciones y solo se trata de estar en alerta en esas zonas.
En cuanto al cumplimiento de las políticas públicas contra el cambio climático, Armando Calderón sostuvo que se ha avanzado lento en su aplicación por parte de los municipios.
“Influye el que las administraciones municipales se están renovando constantemente, nosotros estamos de manera permanente dándoles capacitación para que apliquen estas políticas y hagan su planificación”.