EL UNIVERSAL. En México hay un total de 6.7 millones de personas desocupadas o con disponibilidad de trabajar si tuvieran una oportunidad laboral, entre los cuales destacan las mujeres, así como los jóvenes, de acuerdo con datos del Inegi.
Y es que el número de personas que demandan un empleo en el país es mayor al reconocido regularmente, si se considera a quienes buscaron recientemente una plaza, como a quienes estarían en disposición de trabajar si surgiera una oportunidad, explicaron expertos.
El número de desocupados en junio ascendió a un millón 661 mil personas que buscaron activamente un empleo, es decir, 2.7% de la PEA.
Sin embargo, también hay 5 millones 41 mil personas que no buscaron empleo, pero que están disponibles para trabajar si tuvieran una oportunidad, la parte oculta del desempleo.
En esta situación las mujeres son mayoría, con más de 4 millones, una tasa de desocupación ampliada femenina de 13.8%, muy superior a la de 2.8% reconocida normalmente; los hombres son 2 millones 696 mil, con tasa de 7.1%, por arriba de la reportada de 2.6%.
Hay más dificultad para mujeres de buscar trabajo, aunque lo necesiten y se declaren disponibles, y es parte de la exclusión de género que persiste en el sistema laboral mexicano.
La desocupación ampliada es más explícita pues exige atender las fallas estructurales del mercado, como es la baja participación femenina, pues las mujeres no aplican a trabajos por labores de cuidado y del hogar.
En la Población No Económicamente Activa hay además 2 millones 207 mil personas con interés de trabajar, pero en un contexto que les impide hacerlo.
El otro grupo importante del desempleo ampliado es el de los jóvenes de 15 a 29 años, que sumaron 2.8 millones en el primer trimestre de 2025, con 41% del total.
Este problema afecta sobre todo a aquellos jóvenes sin estudios universitarios, así como por venir de ambientes familiares adversos, hogares en pobreza, con mala nutrición y bajo desempeño educativo, y les genera mayor exclusión.